¿Qué es la población?
Una población es un conjunto de
individuos que comparten una característica o un conjunto de estas. Una
población se define comúnmente por la geografía, como todos los humanos
en la Tierra, todas las personas en México o todas las personas en
Bogotá. Los demógrafos (personas que estudian las poblaciones humanas)
llaman a esto una población natural. Un conjunto de cualquier tipo de
ser vivo es considerado una población, pero en este artículo nos
enfocaremos en las poblaciones humanas.
Hay otras maneras aparte de la
geografía para definir y estudiar a las poblaciones. La época,
inclinaciones políticas, creencias religiosas o características físicas
son formas de dividir a las personas en diferentes poblaciones. El
estudio de poblaciones se logra examinando estas poblaciones diferentes y
observando dónde coinciden. Por ejemplo, si conoces la población de
estadounidenses que son republicanos y conoces la población que vive en
Texas, puedes estudiar dónde se entrelazan esas poblaciones y aprender
algo sobre los republicanos y tejanos.
¿Por qué contar a las personas?
Entre las muchas razones por las que
le damos seguimiento a los datos poblacionales, una es igual de
importante hoy que hace más 1,000 años. ¿Cuál es la razón? Aquí hay una
pista; la palabra censo viene de la palabra latina censere, que
significa “estimar”.
Estimación de la población
La manera más básica (aunque no
necesariamente la más fácil o precisa) de medir la población es
simplemente contando a todos. Esto se conoce como un censo y
generalmente es realizado por los gobiernos. Antiguamente, las
organizaciones religiosas realizaban censos, pero generalmente a nivel
local o regional. El imperio Romano llevó a cabo censos para estimar el
grupo de hombres en edad militar y para efectos fiscales, pero estos
eran limitados ya que los Romanos tenían que reportarse con los
funcionarios del gobierno en su ciudad natal para ser contados. Las
personas pobres o que no podían viajar casi nunca eran contados.
Un censo a veces se conoce como una
enumeración completa, cada persona es contada por medio de entrevistas
personales o encuestas. No hay estimaciones.
Incluso un censo completo tiene
límites. En países con áreas muy remotas, puede ser imposible para los
censistas contar a todos. Y es que muchas veces los encuestadores tiene
miedo de entrar a algunos barrios o colonias que están muy alejadas.
Una alternativa a un censo de
enumeración completo es el muestreo. Podrías estar familiarizado con
este como el método que utilizan las empresas de investigación de
mercado y analistas políticos para realizar su investigación. Los
estadísticos utilizan una fórmula matemática para saber el número mínimo
de personas necesarias para constituir una muestra representativa de la población.
Por ejemplo, si la población total es de 1,000 personas, los
investigadores podrían encuestar directamente a 150 de ellos. Luego,
pueden tomar los datos de la muestra y extrapolarlos a toda la
población. Si el 10% de las personas en la muestra son zurdas, se puede
suponer que 100 de una población de 1,000 son zurdas.
El muestreo puede generar resultados
más precisos que le enumeración completa, pero existen algunas
advertencias. Todas las muestras tienen un margen de error,
ya que siempre existe la posibilidad de que la muestra seleccionada
para la encuesta difiera de alguna manera de la población total.
Esto se expresa como un porcentaje de
posible variación, como “más o menos cuatro por ciento.” Entre más
grande sea el tamaño de la muestra, menor será el margen de error.
Además, las muestras deben ser elegidas de la manera más aleatoria
posible. Esto puede ser más difícil de lo que suena.
Digamos que quieres encuestar a una
muestra de todas las personas en Chile. Un método utilizado en el pasado
era seleccionar nombres al azar del directorio telefónico. Sin embargo,
esto elimina la posibilidad de que ciertas clases de personas sean
seleccionadas para la muestra: personas de bajos recursos que no cuentan
con un teléfono; personas que utilizan el celular y por lo tanto no
aparecer en el directorio telefónico; personas con números no
publicados; y la mayoría de los estudiantes universitarios.
La recopilación de datos
poblacionales de lugares que no realizan censos, o de periodos
históricos en donde los censos no eran comunes, se logra reuniendo toda
la información demográfica disponible. Podría haber censos parciales,
datos de la población local o información recopilada por grupos
religiosos o cívicos. Examinar los registros de nacimientos y
defunciones proporciona otras pistas.
Quizá te interese leer más sobre el muestreo aleatorio simple, uno de los tipos de muestreo de probabilidad.
Características de las Población
La cantidad de personas en las poblaciones no es todo lo que se puede saber sobre estas. También están datos como:
Edad: La edad de una
población puede decirnos mucho sobre lo que esa población está haciendo,
así como lo que va a hacer en el futuro.
Ubicación: Averiguar dónde
vive la gente es una de las principales razones por las que diversos
países realizan su censo. Muchas programas gubernamentales también basan
sus fondos en pautas demográficas. Los datos de ubicación también nos
informan sobre el movimiento de las personas.
Datos Socioeconómicos: Nos
ayudan a conocer el tipo de concentraciones de gente en ciertas áreas
urbanas o por ejemplo las altas concentraciones de personas con cáncer
cerca de ciertas zonas industriales.
Raza: El estudio demográfico
de la raza es muy polémico. Científicamente, no existen diferentes
“razas” de seres humanos. La diferencia entre los asiáticos y los negros
es la misma que la diferencia entre las personas con ojos marrones y
las personas con ojos azules. Sin embargo, la idea de la raza sigue
desempeñando un papel importante en nuestras sociedades. Muchos de
nosotros nos identificamos como parte de una cierta raza por razones
culturales. Los demógrafos pueden estudiar las poblaciones raciales para
obtener información sobre temas que podrían enfatizarse en un grupo
racial, como un problema médico.
Crecimiento de la Población
La población humana ha aumentado
prácticamente sin parar a lo largo de la historia. Ya que no existen
registros sólidos de la mayoría de los períodos históricos, los
académicos tienen que estimar las poblaciones mundiales basándose en
toda la información demográfica que pueden reunir. En 1,000 A.C., había
entre 1 y 10 millones de seres humanos. Para 1,000 A.C. había 50
millones. En 600 DC, la población mundial había alcanzado los 200
millones. A principios del siglo XX, vivían 1,500 millones de seres
humanos en el planeta.
Nuestra población parece aumentar con
mayor velocidad a medida que pasan los siglos. La razón principal de
esto es simple, cada incremento en la población crea más gente capaz de
reproducirse. La población crece exponencialmente.
Si un millón de personas tienen
suficientes hijos para duplicar la población (tomando en cuenta las
tasas de mortalidad), entonces la siguiente generación tendrán el doble.
Duplicar la población da lugar a cuatro millones de personas. Esto se
conoce como el Modelo de Crecimiento de Malthus, nombrado en honor a uno
de los primeros investigadores de la población, Thomas Malthus.
Por lo tanto, no debería
sorprendernos que en 100 años entre 1900 y 2000, la población mundial se
cuadruplicara, superando los seis mil millones.
Altibajos
La subida más o menos constante de la
población humana está intercalada en varios puntos con picos (saltos
repentinos y rápidos en la tasa de aumento que eventualmente se nivelan)
y bajadas, disminuciones repentinas en la población total.
Los picos de la población mundial en
el pasado solo se pueden estimar gracias a los registros históricos
incompletos, pero la evidencia del crecimiento repentino de la población
coincide con el descubrimiento de herramientas, domesticación de los
cultivos y la Revolución Industrial.
Cada uno de estos grandes cambios en
la forma en la que los humanos vivieron sus vidas dio lugar a mayor
capacidad para producir alimentos, bienes o mano de obra. También
liberaron a algunas personas para realizar empleos especializados y
mejorar la calidad de vida en general. Estas condiciones le permitieron a
los seres humanos desarrollar y aumentar sus poblaciones. En general,
los períodos de crecimiento de la población coinciden con períodos de
prosperidad.
La problemática poblacional
A medida que la población crece, esta
es puesta bajo presión. Esta presión puede provenir de una falta de
recursos para alimentar, alojar y proporcionar servicios; una
enfermedad; una guerra; o falta de espacio. La presión puede aliviarse
con la migración. Las guerras, enfermedades y la hambruna también
alivian la presión ya que matan a una parte de la población. De hecho,
la base de las famosas teorías poblacionales de Thomas Malthus es que la
población humana crecerá inevitablemente más allá de la capacidad de la
Tierra para sostenerla.
La teoría de Malthus es conocida como “La Explosión Demográfica”
(The Population Bomb), y ganó popularidad con el movimiento ambiental
en los años 70. Los miedos de la sobrepoblación mundial están basados en
varias factores:
- No seremos capaces de producir suficiente comida para alimentar a todos.
- No hay suficiente espacio para que todos vivan.
- Los seres humanos dañan el medio ambiente. Demasiados humanos prácticamente destruirán el ecosistema, reduciendo aún más nuestra capacidad para producir alimentos. Te invito a leer: Descubre cómo la investigación online reduce el impacto ambiental.
- No podemos proveer la infraestructura social para cuidar a todas las personas.
Nuestra vulnerabilidad a estos
factores está basada en la densidad demográfica, el número de personas
por unidad de superficie. Desde la Revolución Industrial, la
urbanización ha causado un gran aumento en la densidad demográfica en
las ciudades.
La densidad demográfica más alta
posiblemente haya ocurrido en la Ciudad amurallada de Kowloon en Hong
Kong. En algún punto, cerca de 50,000 personas vivían en un megabloque
que media alrededor de 150 por 200 metros. El distrito prácticamente
anárquico fue evacuado y derribado para construir un parque. Hoy en día,
las áreas de mayor densidad demográfica se encuentran en las
principales áreas urbanas. India y China tienen grandes áreas de alta
densidad demográfica.
A medida que aumenta la densidad de
población en una área determinada, se aproxima a lo que se conoce como
capacidad de carga. Este es el máximo número de personas que una área es
capaz de soportar en términos de recursos disponibles.
Para los animales, esto es fácil de
calcular. Por ejemplo, una cabra podría necesitar 50 yardas cuadradas de
pasto para sobrevivir. Por lo tanto, una área de 200 yardas tiene la
capacidad de carga de cuatro cabras. Calcular la capacidad de carga para
los humanos es mucho más complejo. Podemos utilizar la tecnología para
optimizar nuestra producción de recursos. Podemos transportar recursos
de otras áreas. Podemos crear sistemas de saneamiento y otras
infraestructuras para soportar una mayor densidad.
Control de la población
¿Qué pasa cuando alcanzamos la capacidad de carga en un área? Hay varias opciones:
- La gente se traslada a otra área.
- Las personas son menos saludables, por lo tanto, menos capaces de reproducirse.
- La presión de la población conduce a la guerra.
- Las condiciones insalubres y la proximidad causan brotes de enfermedades.
- Optimizamos la generación de recursos y la infraestructura, aumentando la capacidad de carga.
Los humanos también son capaces de
controlar voluntariamente sus poblaciones. Esto puede ocurrir a gran
escala, como un programa o ley gubernamental o a nivel individual. Las
personas han tenido mayor acceso al control de la natalidad desde los
años 60.
Los gobiernos pueden controlar las
poblaciones imponiendo penas por tener demasiados hijos, haciendo que
sea más conveniente tener menos hijos y esterilizando a las personas
para que no puedan reproducirse. Desafortunadamente, algunos gobiernos
han intentado reducir o eliminar ciertas poblaciones que consideran
indeseables matándolas en masa, esto es conocido como genocidio.
Disminución de la Población
Te podrías sorprender al saber que no
todo el mundo piensa que una población creciente es algo malo. De
hecho, algunas personas piensan que nos estamos enfrentando al problema
contrario, que nuestra población no está creciendo lo suficientemente
rápido y que podría empezar a reducirse.
¿Cómo podría estar sucediendo? La
respuesta es fácil: control de la natalidad o anticonceptivos. Desde los
años 60, cuando las mujeres en las naciones industrializadas tuvieron
más acceso a las píldoras anticonceptivas, el ritmo en el que la
población mundial crece cada año ha disminuido constantemente. Esto se
está convirtiendo en un problema en algunos países, sobre todo si su
población ha disminuido debido a otros factores como enfermedades o
guerras.
¿Por qué una población en declive
sería algo malo? ¿No sería mejor si usáramos menos recursos naturales e
hiciéramos menos daño al medio ambiente?
Probablemente sería mejor en algunas
formas. Pero también es importante tener una economía mundial saludable y
el crecimiento económico mundial constante es impulsado en gran medida
por el aumento de la población. Las personas son consumidores. Más
consumidores es igual a más dinero y más dinero equivale a una economía
más sana.
Quizá te interese conocer más de los retos y desafíos en el estudio del consumidor.
La pérdida de población es un
problema en ciertos lugares donde factores externos han reducido la
población. En estos lugares, la población puede llegar a ser tan baja
que sufre de un colapso de la población. Este es el punto en el que el
espacio ya no es lo suficientemente grande para sostener una economía
funcional. Las personas que quedan simplemente se van si pueden hacerlo.
Aquellos que son demasiado pobres para trasladarse terminar viviendo en
pobreza extrema.
¿Quién está disminuyendo?
Un argumento dice que el descenso
demográfico es un problema porque están disminuyendo las poblaciones
equivocadas. Esta línea de pensamiento afirma que los europeos, los
estadounidenses y asiáticos son más propensos a tener menos hijos y
tienen mejor acceso a un método anticonceptivo eficaz. Estas poblaciones
están disminuyendo mientras que la gente pobre de países
tercermundistas parecen estar reproduciéndose rápidamente. ¿Este
argumente tiene alguna validez?
Es cierto que las personas en las
naciones industrializadas tienden a tener menos hijos y tenerlos a mayor
edad, y tienen un mejor acceso al control de la natalidad. Sin
embargo, un niño nacido en Estados Unidos consumirá una gran cantidad de
recursos y generará toneladas de contaminación durante su vida. Un niño
nacido en un país muy pobre usará una pequeña fracción de estos
recursos, dejando una huella ecológica mucho más pequeña. ¿Tu qué
opinas?
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